Una
reforma en su vivienda es sinónimo de polvo, ruidos, desorden, escombros etc... Por tanto, la planificación de la Reforma debe planificarse al dedillo. No solo en cuanto al dinero en invertir en la reforma, sino también en lo referente a plazo de ejecución, momento de realización, organización y todo cuanto le pueda afectar a su vida personal, ya que si tiene que cohabitar en la misma vivienda que está realizando la reforma, hay que tener en cuenta todos los detalles. Es por ello que vamos a desgranar algunas pautas a tener en cuenta antes de realizar la Reforma en casa.
- Planificación de todos los detalles.
¿En qué va a consistir la Reforma? ¿ Se van a
reformar cuartos de baños? ¿se va a realizar además una
Reforma en la Cocina? Aprovecho ¿y reformo todo el hogar? ¿se va incluir la pintura? Por tanto, la primera cuestión es si la Reforma va a ser parcial o integral. Otra cuestión es ¿cuál es la mejor fecha para iniciar las obras? Hay que tener en cuenta que la reforma puede ser unas pocas semanas o prolongarse unos meses, por lo que la planificación de todos los detalles es esencial.
Sobre la fecha, podemos decir que en otoño o en invierno generalmente se producen menos molestias a los vecinos ya que las ventanas de la vivienda están cerradas y por tanto se emiten menos ruidos y polvo al exterior que en primavera o verano que si van a estar abiertas. La ventaja de las ventanas abiertas es que en los meses de verano muchos vecinos están de vacaciones, los días son más largos y al estar las ventanas abiertas se producen antes el secado de los materiales.
Es conviene no molestar a los profesionales durante su trabajo, pero sí controlar de una forma que no produzca molestias de como están realizando el trabajo sin interferir en el proceso de la reforma, o por lo menos hacerlo lo menos posible.
hay que tener claro qué materiales se van a utilizar, qué colores... y muy importante hay que tener muy pensado si va a abandonar la casa mientras se haga la reforma o si va a convivir con la obra, por lo que en este caso y si es un piso grande, se deberá adaptar una zona dentro del piso para vivir mientras se está ejecutando la reforma.
- Pedir presupuestos a empresas especializadas.
Lo ideal es pedir al menos tres
presupuestos para tener un buen comparativo. Evidentemente los presupuestos deberán contemplar las mismas partidas y calidades. Hay que eliminar profesionales o empresas sin la acreditada experiencia. Los presupuestos deben de tener una descripción lo más detallada posible de cada uno de las partidas de la reforma.
Lo ideal es que una misma empresa se encargue de realizar toda la ejecución de la obra.
Antes de empezar la obra se deberá saber cuantos serán los profesionales dentro de la obra, y quién será el encargado de la obra. Se deberá especificar los horarios de cada jornada, si se trabajará los fines de semanas, los días de fiesta, etc.
Antes de hacer una reforma y según el tipo de reforma que se llevará a cabo habrá que solicitar diversos permisos y licencias al Ayuntamiento. Las licencias van en función del tipo de obra y que podemos dividir en:
- Obra menor: incluyen las reformas en pavimentos, alicatados y modificaciones de baños y cocinas.
- Obra mayor: cuando se tienen que alterar aperturas de puertas y ventanas que den a la calle, cambios de distribución dentro de la vivienda, en definitiva, toda obra que requiera de proyecto técnico.
En función del tipo de reforma, habrá que pagar una tasa u otra.
Además es importante informarse si hay subvenciones o ayudas para reformar la casa.
- Pasos para hacer la reforma.
Lo primero y antes del desembarco del equipo humano para la reforma habrá que poner a buen recaudo aquellos objetos valiosos y muebles para evitar que se puedan dañar. Si no es posible trasladar algunos muebles, habrá que taparlos con esmero. Otra opción es utilizar, un trastero de alquiler para guardar los muebles y objetos durante la ejecución de las obras.
Ademas habrá que presta cuidado también con los marcos de las puertas que se cubrirán con cartón, otras áreas con plástico, y suelos y escaleras con papel. Si alguna habitación no va a ser objeto de la reforma es aconsejable sellarla. Habrá que tapar también los conductos del aire acondicionado.
Por último, habrá que facilitar accesos, indicar cuales son las vías de entrada y salida de materiales y escombros. También es importante indicar al personal de la obra en qué zona pueden estar y cuál no, indicando que baño pueden utilizar, dónde puede coger el agua para la obra, donde dejar lo utensilios y herramientas de la obra, etc.
Sobre el pago: normalmente se adelanta un 30% del total del presupuesto al inicio de la obra, y al final se retiene un 10% hasta que la obra no esté terminada conforme a lo pactado.
Es importante exigir que el cobro incluya siempre el IVA. Si la renta es de menos de 50.000 euros anuales, se puede desgravar el coste de las obras.
Debe quedar claro el día de comienzo de la obra, así como el plazo que se va a ejecutar la obra.
Informar a los vecinos del inicio de la obra, del tiempo de la misma por lo que no está de más, avisar con carteles en el ascensor o buzones de la obra y pidiendo disculpas por anticipado.
Forrar el ascensor que se utilizará para subir y bajar material, limpiar todos los días las zonas comunes (rellano, escaleras...) que pudieran verse afectadas por los trabajos de reforma, es también una buena idea, y que los vecinos sin duda agradecerán por las pequeñas molestias que se les puedan generar.